Ángel Gil (ALIA): «Uno de mis objetivos es consolidar Aragón como un referente en el panorama logístico a nivel nacional»
Ángel Gil
Gerente del Clúster de Logística (ALIA)
Con una amplia trayectoria en el sector de la logística, Ángel Gil asumió en 2020 la gerencia del Clúster de Logística de Aragón (ALIA). Una etapa que afronta con el objetivo de consolidar la posición de Aragón como referente en el panorama logístico a nivel nacional y en el sur de Europa y también de posicionar la logística como sector en el lugar que le corresponde en la sociedad.
Háblenos de su trayectoria profesional antes de llegar al Clúster de Logística.
Mi experiencia profesional comenzó hace 27 años en un operador logístico de electrodomésticos de gama blanca donde estuve 3 años. De ahí pasé a ser Jefe de Logística de una empresa cervecera (La Zaragozana) durante 4 años. Mi mayor trayectoria fue a continuación en la empresa Pikolin, líder en España y Portugal en el sector descanso.
Entré como responsable de almacén y poco a poco fui ascendiendo hasta alcanzar la posición de Director de Logística en 2008, momento en el cual comencé a liderar cambios profundos en el modelo de distribución de la compañía y a implantar innovadores proyectos de automatización y digitalización que nos permitieron optar y ganar varios premios nacionales e internacionales a la Excelencia Logística.
Desde el año 2017 soy Vicepresidente del Centro Español de Logística. En 2019 comencé andadura en ESIC Business School y actualmente soy Gerente del Cluster de Logística de Aragón (ALIA).
Asume la gerencia de ALIA en un momento complejo, ¿cómo afronta esta nueva etapa?
Pues la verdad es que la asumo como todos los proyectos que empiezo en mi vida, con mucha pasión, energía e ideas innovadoras. Un reto como éste no se puede afrontar de otra forma. Hay que dinamizar un colectivo que está sufriendo muy de cerca las consecuencias de la crisis pandémica y que está muy focalizado en la presión del día a día. Desde la Asociación intentaremos complementar las actuaciones que a lo mejor las empresas no tienen recursos para dedicar.
¿Qué retos se marca para su recorrido al frente de esta institución?
Tengo un objetivo principal que es el de aportar valor a los asociados. Que tengan un buen retorno de los recursos que invierten en el clúster. Tras ese objetivo prioritario quiero conseguir dos temas muy importantes. Uno de ellos es consolidar la posición de Aragón como un referente en el panorama logístico a nivel nacional y a nivel del sur de Europa. Tenemos todos los condicionantes para serlo y necesitamos creérnoslo y ponerlo en valor.
El otro tema es posicionar la logística como sector en el lugar que le corresponde en la sociedad. Esta pandemia ha demostrado que la logística es uno de los pilares fundamentales para que todo funcione con normalidad. Que nuestros supermercados estén abastecidos, los medicamentos en las farmacias y el material sanitario en los hospitales, es gracias a que tenemos una logística invisible a los ojos de la sociedad que trabaja silenciosamente y es el momento de ponerlo también en valor.
Si bajamos a objetivos más cuantificables, me haría muy feliz generar muchos proyectos colaborativos, conectar empresas, organizaciones, instituciones y administraciones que acaben en la generación de puestos de trabajo y de riqueza. Y si esa generación puede ser de empleo juvenil y de parados de larga duración, mejor que mejor.
¿Cómo nace Alia y a qué necesidades responde?
Alia cumplió el año pasado 10 años de existencia. El nacimiento del clúster responde a la necesidad de las empresas del sector de tener un lugar de interacción común donde compartir intereses y ser el canalizador de iniciativas tanto privadas como de enganche con el sector público.
En ese sentido, el clúster recoge los intereses de los asociados y los traslada al foro más adecuado con los interlocutores más adecuados, algo que para una empresa en solitario, le puede costar mucho trabajo conseguir.
Otra de las necesidades importantes a las que atendemos es a la canalización de ayudas y subvenciones públicas a los proyectos de inversión de las empresas. Actualmente, con las ayudas Next Generation que van a venir en los próximos años, es un momento idóneo para abordar este tipo de proyectos de actualización y mejora de las empresas.
El objetivo de Alia es mejorar la competitividad de las empresas integrantes, ¿de qué modo lo logran?
Tenemos varias líneas de actuación. Fundamentalmente son cuatro grandes bloques que detallo a continuación.
1.– Formación y empleo. El primer pilar básico para el desarrollo, ya sea personal o empresarial, es la formación. En Logística, no existe formación reglada universitaria más que en una Universidad privada de Madrid, la Camilo José Cela. En Zaragoza tenemos la de Ceste pero es un título propio, no oficial. Sí que existe formación reglada en formación profesional, pero mi sensación es que no tiene todo el potencial que podría tener.
Hay una gran oferta, pero aún a fecha de hoy, quedan vacantes por cubrir. Y en el ámbito de postgrado y Executive, pasa lo mismo, hay una gran oferta, pero no se llegan a cubrir todas las plazas. Eso responde por una parte a la situación de aislamiento social, pero en gran medida por la falta de concienciación.
Ahí es donde desde el clúster vamos a intentar concienciar a la sociedad en general y al sector logístico en particular. En el clúster tenemos varios centros de formación de muy altísima calidad y especialización, que además son generadores de empleo, bien sea en el formato de prácticas de las formaciones que se imparten o incluso de bolsa de trabajo directa.
2.- Digitalización y nuevas tecnologías. Cuando yo empecé en el mundo de la logística, los profesionales nos dedicábamos a gestionar almacenes y transporte básicamente. Eso no ha cambiado, pero un logístico hoy en día se ocupa también de las nuevas tecnologías y de los avances en digitalización. Y no solo por vocación, sino por necesidad. Hoy en día, los grandes operadores del mercado traccionan a un ritmo que es muy difícil de seguir.
Ellos dominan el big data y aplican inteligencia artificial en el diseño de sus procesos. Si no somos capaces de aplicar esas mismas reglas a nuestra escala, tenemos la batalla perdida. Por eso, desde el clúster podemos acompañar a nuestros asociados en ese camino, que es muy duro, pero más accesible de lo que puede parecer desde fuera, si lo afrontas con el acompañamiento de los partners adecuados.
3.- Sostenibilidad. Hoy en día es el tema estrella que guía las actuaciones de las empresas responsables. No sólo con las obligaciones legislativas, sino con el compromiso que todos deberíamos tener con el planeta. Hemos dañado el medio ambiente en los últimos 20 años, más que en toda la Historia de la Humanidad. Estamos cerca de llegar a un punto de no retorno que sería imperdonable cruzar.
Cada día desaparecen especies, se desertizan miles de kilómetros cuadrados de tierra… y en mano de los logísticos hay muchas iniciativas que se pueden tomar para aportar nuestro granito de arena a que no se llegue a ese punto. Desde el clúster de logística hemos firmado un acuerdo con el clúster de la energía CLENAR para intentar crear iniciativas en eficiencia energética, generación de energía para autoconsumo y plantear una movilidad más sostenible.
4.- Desarrollo de Infraestructuras. En este ámbito, debemos luchar para no quedar relegados frente a otros territorios que históricamente han tenido un peso político más importante que el nuestro. Zaragoza tiene muy buenas infraestructuras, de hecho es una de las mayores fortalezas que podemos aportar logísticamente en Aragón. Pero no se puede decir lo mismo de Huesca y Teruel.
Sólo tenemos que ver la conexiones ferroviarias con ambas capitales, que son muy parecidas a las que había hace un siglo. Tenemos que poner en valor la ubicación geoestratégica tan privilegiada que tenemos y como decía antes, creérnoslo y reivindicarlo. Aquí, en Madrid y en Bruselas. Hemos de hacernos oír en todos los ámbitos.
Y todo ello, unido transversalmente con la colaboración entre empresas. La economía colaborativa es el futuro del desarrollo económico. Y en el clúster vamos a estar muy focalizados y muy proactivos en intentar conseguir ese desarrollo colaborativo.
Háblenos del clúster: ¿Cuántas empresas lo componen? ¿Cuántos empleados suponen? ¿Qué porcentaje del PIB representan y cuánto facturan al año?
Con las recientes incorporaciones de los últimos meses, estamos en torno a 60 empresas agrupadas en fabricantes, instituciones, entidades de formación, empresas de servicios y centros tecnológicos, y de ellas, más o menos la mitad son grandes empresas y la otra mitad son pymes. Los datos que expongo son datos agregados de las empresas que en algún caso son multinacionales con empleos fuera de Aragón, pero por dar un dimensionamiento global, las empresas asociadas al clúster suman un número de empleados de 22.500, con una facturación de 4.816.667 €, lo que supone un peso de un 12,55% del PIB.
¿Qué servicios ofrecen a las empresas que integran el Clúster?
Fundamentalmente queremos ser su punto de referencia para solucionarles cualquier necesidad en el ámbito logístico que puedan necesitar. Además, cuando podamos volver a los eventos de networking, es un escaparate ideal para proyectar las propuestas de valor de los socios a otros asociados y por supuesto, también al exterior. Y por supuesto, acompañarles en los proyectos de innovación tecnológica que quieran implantar y acercarles a los entornos colaborativos con otros asociados.
¿En qué proyectos de innovación y de intermodalidad están trabajando actualmente?
Actualmente estamos adheridos a varios proyectos de manifestaciones de interés para lo que luego pueden llegar a convertirse en proyectos reales. El denominador común de todos ellos es la digitalización y la sostenibilidad. Un uno de ellos, por ejemplo, se está planteando conectar las ciudades por vía ferroviaria con unos hubs multimodales de los que saldrían plataformas autónomas que acercarían la mercancía a microhubs en el centro de las ciudades. Como se puede ver, se dan todos los ingredientes: digitalización, sostenibilidad e innovación.
¿Cuáles son las principales dificultades con las que se han encontrado en ALIA a raíz de la pandemia?
ALIA como tal no ha sufrido directamente la pandemia. Pero ha estado cerca de sus asociados y ha sufrido de lleno con ellos las dificultades del sector. En las primeras semanas de pandemia, los transportistas no tenían ni siquiera abiertos los bares o restaurantes de las gasolineras para poder comer o asearse. En Reino unido, los problemas derivados del Brexit unidos a los test PCR que exigían para cruzar fronteras, provocaron importantes colapsos en Navidades. En muchas ocasiones, no se tienen en cuenta las repercusiones que tienen ciertas decisiones en sectores tan críticos como el de la logística.
¿Qué características hacen de Aragón una potencia logística reconocida internacionalmente? ¿Y qué ventajas ofrece con respecto a otros lugares?
Ya en tiempos de los romanos, Caesaraugusta era uno de los principales nodos de conexión de sus calzadas. Sin duda, su ubicación geoestratégica es privilegiada, no sólo en el ámbito nacional a 300 km de las 4 ciudades más importantes del país, sino también a una equidistancia de unos 1.300 km con las principales ciudades europeas. Es, y vamos a potenciarlo más, un hub ferroviario de primer orden donde se van a cruzar los corredores cantábrico-mediterráneo con la autopista ferroviaria que unirá Algeciras con Madrid y Zaragoza y soñamos con un futuro que nos una con Europa a través de los Pirineos en la Travesía Central.
Tenemos las dos terminales ferroviarias más importantes del interior de la Península Ibérica (TMZ y Adif en Plaza) y el aeropuerto con mayor volumen de carga y destinos directos de aviones cargueros de España, aunque en volumen total seamos segundos por detrás de Madrid Barajas si contamos con las bodegas de los vuelos comerciales. Si a todas esas excelentes infraestructuras y posibilidades, le añades que tenemos dos centros tecnológicos de referencia mundial como son el ZLC y el ITA en el sector tecnológico logístico, tenemos una coctelera de grandes potencialidades a poner en valor.
¿Por dónde pasa el futuro de la logística aragonesa?
Estamos en un momento de fuerte crecimiento y de visualización ante la sociedad. La pandemia y el modo de vida que nos ha impuesto está poniendo de relieve la importancia de nuestro sector, tradicionalmente poco visibilizado. En momentos de crisis y de restricción de la movilidad, poder mantener un nivel de compras de artículos de primera necesidad en los supermercados y farmacias, ha sido clave.
El potente desarrollo del ecommerce en estos meses también ha contribuido a esa visualización. Y todo ello, redunda en una adaptación constante a las nuevas exigencias del mercado. Estamos protagonizando un cambio tan rápido, que sólo dentro de unos años, al mirar hacia atrás, seremos conscientes de la importancia de lo que hemos hecho en muy poco tiempo. Aragón debería de convertirse en un hub logístico de referencia del sur de Europa.
Redacción AEA /LLM