Juan José Cubero Marín
Exprofesor titular de la Universidad de Zaragoza
jjcooperm@hotmail.com
Realmente la sostenibilidad, como se sabe, ya ha llegado; hasta tal punto que la Responsabilidad Social Empresarial, RSE, se está abandonando, para ser sustituida por la ESG, siglas que corresponden en inglés a Environmental, Social y Governance y que se ofrece a las empresas para aplicar en sus estrategias, junto con los retos del medioambiente, lo social y la gobernanza.
Parece necesario introducirnos en el Informe de Forética “Tendencias ESG 2.023”, para que el mundo empresarial conozca qué es lo que opina esta importante asociación. Se trata de un documento de 28 páginas, que se puede consultar en www.foretica.org.
Señala, que en medio de tantas incertidumbres que nos acompañan, lo mejor para despejarlas y asegurar la continuidad del negocio, es entender la verdadera sostenibilidad, como algo necesario para las empresas y así, poder pensar, como objetivo de las mismas, en el progreso de las organizaciones, de las personas y de la sociedad en su conjunto.
Las empresas han aceptado y así lo están aplicando, los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible, ODS, que entre otras cosas, con su aplicación, se puede conseguir el bienestar para todas las personas; aunque hablar de bienestar para 8.000 millones de habitantes, puede parecer una meta inalcanzable.
Ante estos retos, el Informe de Forética, entre otras muchas cosas, propone que se tengan en cuenta, los siguientes aspectos:
- Visión a largo plazo, es decir, pensar en lo que se podría alcanzar en los próximos diez años, por ejemplo. Solo así, se puede desarrollar e implantar las nuevas iniciativas y descubrimientos, que con toda seguridad llegarán. La prospectiva se encarga de llevarnos al futuro. Si no se sabe dónde queremos ir no llegaremos a ningún sitio.
- La Economía Circular, también ha llegado. No hay otra opción; es una necesidad pensar en una utilización más eficiente de los recursos materiales, que cada vez son más escasos.
- El Consumo Responsable, los clientes y consumidores, no se les deben olvidar a las empresas, ya que de ello dependerá la rentabilidad del negocio. Conocer sus expectativas, marcarán la estrategia de la empresa en materia de ventas.
- El talento y el compromiso social: El propósito de entender que es muy importante, acceder y retener el talento, es necesario para intentar alcanzar la excelencia. El compromiso social debe ser el centro de las acciones que promuevan las empresas. A veces nos cuesta pensar en los demás.
- Las cadenas de suministros deberán rediseñarse, (reingeniería), debido al peso que tienen tanto las TIC como la aplicación de los ODS y, otras iniciativas y regulaciones.
- El Impacto de la misma ESG, deberá entrar en la línea de la mejora continua, en sus tres soportes, Medioambiente, en lo Social y en la Gobernanza.
Como aportación personal, incluyo una pequeña reflexión, que no es otra cosa que, la presencia, cada vez más fuerte, de lo que ya se conoce como Economía del Bien Común. Todas las líneas de trabajo que se están desarrollando, parece que culminan en una idea, que es fijar como objetivo global, el Bien Común. Solo así, se puede conseguir un nivel de bienestar general, que tanto necesitamos las personas.