Chema Cosculluela (Vitalia): «Ponemos nuestros esfuerzos al cuidado de las personas, ofreciendo servicios de gran calidad a precios asequibles»
Chema Cosculluela
Presidente del Grupo Vitalia
Vitalia es una empresa aragonesa especializada en la prestación de servicios socio sanitarios y en la atención de personas en situación de dependencia, principalmente personas mayores, personas con discapacidad física o psíquica y personas con enfermedades mentales. Actualmente, cuenta con 70 centros en España con una capacidad de más de 10.000 plazas. En Aragón, Vitalia tiene 13 centros, con capacidad para 1.546 residentes y 890 plazas de centro de día.
Háblenos brevemente de su trayectoria profesional.
Recuerdo con cariño la etapa en la que junto a un grupo de empresarios fundamos en Huesca OSCAVAL, SGR una entidad de avales para contribuir a resolver los problemas financieros de las pequeñas y medianas empresas, la cual con el andar de los años fusionamos con otras entidades aragonesas dando como resultado a la actual AVALIA y de la que fui CEO hasta el año 1992, en el que decidí independizarme creando TECA CONSULTORES, S.A. especializada en consultoría de desarrollo regional y en la que teníamos entre otros clientes al grupo SAR que lideraba el sector de residencias de mayores en España.
Al separarse las dos familias que controlaban el accionariado de esta sociedad, una de las partes nos planteó la posibilidad de asociarnos con ellos para desarrollar un proyecto de ámbito nacional, pero al cabo de un año viendo que la relación no acababa de funcionar decidimos empezar por nuestra cuenta y el año 1998 creamos VITALIA.
¿Cuántos centros y cuántas camas tiene Vitalia?
En la actualidad VITALIA tiene 70 centros operativos en España con una capacidad asistencial que supera ya las 10.000 plazas de residencia en los que hemos invertido 800 millones de euros y ocupamos una plantilla de 4.500 trabajadores de los que 1.250 son titulados universitarios, en Aragón contamos con 13 centros con capacidad para 1.546 residentes y 890 plazas de centro de día.
Somos, además, el grupo residencial con mayor expansión, ya que estamos desarrollando 30 proyectos con una capacidad asistencial proyectada de 5.000 nuevas plazas de residencia, en los que estamos materializando una inversión de 500 millones de euros que nos permitirá consolidar en los próximos 4 años una dotación de 15.000 plazas residenciales y la creación de 7.500 puestos de trabajo directos.
¿Cómo definiría la filosofía de Vitalia?
Somos una empresa de carácter familiar que, a pesar del importante crecimiento mantenemos ese carácter, con estructuras ágiles que nos permiten centrar todos nuestros esfuerzos al cuidado de las personas en nuestros centros, ofreciendo servicios de gran calidad a precios asequibles.
El trato afable y cariñoso constituye el rasgo más característico de nuestro ADN, que día a día nos esforzamos en mantener.
Además, llevamos en nuestros genes el impulso a la innovación y la creatividad, lo que nos está permitiendo liderar no sólo la expansión, sino el cambio de modelo residencial en España.
¿Cuéntenos cómo es el modelo Vitalia al que hace referencia?
El modelo residencial más extendido actualmente, hace que la persona se tenga que adaptar en su edad más adulta, a una vida institucionalizada, masificada, con amplios salones y comedores, habitaciones compartidas, horarios estrictos, comidas y actividades iguales para todos…, y muy determinado por criterios asistencialistas. Se llega a parecer a un hospital de baja intensidad. Pero nadie quiere vivir en un hospital. Todos queremos vivir en casa; por eso, nuestro modelo está pensado para vivir, nuestro modelo es la Casa.
¿Cuáles son los rasgos que caracterizan al modelo ‘Casa’ por el que apuesta Vitalia?
Llamamos a nuestro modelo ‘Casas para vivir con jardín’. Porque queremos que las personas puedan mantener con nosotros su forma de vida, su intimidad, la convivencia familiar…, que puedan decidir cómo quieren vivir. Frente al modelo tradicional, en el que la persona se tiene que adaptar al centro, nosotros tratamos de adaptar el centro a la persona, conociendo su trayectoria vital, sus gustos y aficiones, sus relaciones familiares, etc., para establecer compromisos antes de ingresar, sobre los aspectos de su vida que quiere mantener en nuestro centro.
Explíquenos cómo se concreta todo eso.
Lo primero es garantizar la intimidad, con habitaciones individuales que sean algo más que lugares para dormir; incluso llevar el desayuno a la habitación, si el residente quiere y a la hora que nos diga. En vez de grandes salones y comedores, espacios hogareños, Unidades de Convivencia para grupos reducidos de residentes, que las familias puedan comer con el residente cuando quieran, incluso alojarse en el centro. Que haya posibilidad de elegir menú y decidir qué quieren comer…
Comencemos hablando de intimidad.
La intimidad es fundamental para vivir como en casa. Piensa si te gustaría compartir el espacio más íntimo, la habitación, con una persona desconocida. En los nuevos centros que construye Vitalia, el porcentaje de habitaciones individuales es del 90%. Todas con baño propio y luz exterior, para que el residente pueda estar en su habitación, si lo desea, descansando, leyendo, viendo la tele o desayunando a la hora que quiera o recibiendo a sus visitas. Es su espacio de intimidad.
¿Y las Unidades de Convivencia?
Son lo más característico del nuevo modelo. Son espacios para grupos reducidos de residentes, en nuestro caso entre 15 y 20, con ambiente hogareño, que evitan la masificación y favorecen la convivencia y una atención más personalizada.
Las equipamos con mobiliario atractivo y un pequeño módulo de cocina (vitrocerámica, fregadero, microondas, frigorífico, vajilla…) para que el residente pueda tener sus bebidas, yogures, galletas, fruta…, calentarse un café con leche o una infusión, o realizar algún postre o comida que le apetezca, con apoyo del personal auxiliar o con sus familiares o visitas, como en casa.
Cada Unidad cumple funciones de sala de estar y comedor, lo que evita el estrés de los continuos desplazamientos de las personas residentes, muchos de ellos en sillas de ruedas.
Además, procuramos que el personal gerocultor, el que está más en contacto con los residentes, sean siempre los mismos, lo que permite un mejor conocimiento y un trato más personalizado.
¿Cómo se organizan las Unidades de Convivencia?
Cada persona elije con quien quiere vivir. La libertad de elección es fundamental. Que vivan juntas personas con afinidad entre ellas, con gustos parecidos.
Este modelo de organización nos está dando muy buenos resultados, se nota en cuanto entras al centro, la tranquilidad, el ambiente relajado, la actividad…
Por supuesto, puede ser que una persona quiera vivir en una determinada Unidad, pero el resto no quieran vivir con ella, porque tenga una convivencia difícil.
Nos decía que en el modelo Vitalia, a las Unidades de Convivencia las llaman “Casas”
Sí, y les ponemos nombres significativos de la zona, cada Casa tiene su nombre: Casa Goya, Casa Los Fueros, Casa Costa… Es un guiño a la tradición de muchas zonas de Aragón; de donde yo procedo, a las personas se nos identifica por la “Casa” a la que pertenecemos. En mi aldea se me conoce como Pepe, de Casa Cavero.
La Casa identifica a la persona, eso es lo que queremos que sean la Unidades de Convivencia para el residente, su Casa.
¿Todas las residencias de Vitalia están organizadas en Unidades de Convivencia? Habrán tenido que realizan hacer importantes reformas en los centros, ¿es así?
Hemos sido el primer grupo residencial en adaptar todos nuestros centros al nuevo modelo. Hoy todos hablan del nuevo modelo y de las Unidades de Convivencia. Vemos administraciones o empresas anunciando que han implantado una unidad de convivencia en uno de sus centros. El Acuerdo Marco de Concertación aprobado por el IMSERSO y las CCAA en 2022, establece la obligatoriedad de que los centros de mayores se organicen en Unidades de Convivencia.
Nosotros comenzamos ese proceso en 2017, cuando suponía incluso enfrentarnos a normativas obsoletas que no permitía ese tipo de espacios. Fuimos innovadores y referencia del nuevo modelo, porque en 2020, antes de la pandemia, todos nuestros centros estaban organizados en Unidades de Convivencia.
Claro que nos ha supuesto un gran esfuerzo: entre 2017 y 2020 tuvimos que adaptar arquitectónicamente y en el funcionamiento 48 centros, con 6.591 plazas. Después hemos inaugurado o adquirido 21 centros, todos los cuales nacen ya o están adaptados al nuevo modelo.
¿Y lo de Casas con jardín?
Esa es una característica singular del modelo Vitalia. Queremos que nuestros residentes puedan disfrutar del aire libre de manera habitual. Para ello, todas nuestras Casas tienen acceso directo a terrazas o jardines. Además, cuidamos mucho el mobiliario y las plantas en estas zonas, para hacerlas atractivas, incluso con pérgolas para que puedan ser utilizadas en días de mucho sol o de viento.
Mencionaba la importancia que tiene la convivencia familiar en el modelo residencial Vitalia.
Mantener y favorecer la convivencia familiar es esencial para los residentes. Por eso en nuestros centros los familiares pueden acceder a las Unidades de Convivencia, a las terrazas y jardines, a la habitación…
Además, somos absolutamente innovadores al implantar en todos nuestros centros comedores para familiares, preparados y decorados con gusto, para que puedan comer con el residente el día que quieran. No es lo mismo ir de visita que quedarse a comer, como en casa. Eso permite también que los familiares prueben nuestra comida el día que quieran. Creemos que es la mejor forma de democratizar nuestras cocinas.
También hemos instalado apartamentos familiares para que se puedan alojar en el centro para acompañar al residente o compartir con él situaciones especiales.
Hablando de comida, suele ser algo que, con frecuencia, suscita quejas en las residencias.
Lo entiendo perfectamente. La comida en cualquier institución suele ser aburrida y repetitiva. Y para las personas mayores tiene una gran importancia no solo nutricional sino por cómo responde a sus gustos. En todos los centros Vitalia tenemos cocina propia, para ofrecer comida casera y adaptada a los gustos de cada zona.
Establecimos hace tiempo el doble menú, la posibilidad de elegir entre dos primeros y dos segundos platos, tanto en comida como en cena. Además de la alternativa siempre de un postre casero.
Hemos creado comités culinarios en todos los centros, en los que representantes de los residentes deciden, con la dirección y la cocinera, cómo quieren que se cocine, según sus gustos. Y comités de cata, formados por dos trabajadores y dos residentes, que prueban y valoran cada plato del menú, en comida y cena, antes de ser servidos.
Tenemos también un Canal Cocina con el conocido chef y comunicador aragonés, Daniel Yranzo, en el que presenta recetas magistrales, con los mismos productos que utilizamos en nuestros centros, para que nuestros cocineros las reproduzcan, ofreciendo calidad e innovación en los menús. Os invito a visitar ese canal, os sorprenderá.
¿Qué son las UTIs que anuncian los centros Vitalia?
Son Unidades de Terapias Intensivas, y constituyen uno de los elementos más importantes del modelo Vitalia. Porque estamos comprometidos con la rehabilitación neurológica y funcional de nuestros residentes y usuarios. Para ello hemos dotado a las UTIs de las tecnologías más avanzadas y hemos formado equipos especializados de profesionales que están logrando resultados espectaculares en materia de rehabilitación, ofreciendo tratamientos específicos adaptados a las necesidades de cada persona. De las más de 3.000 personas tratadas en nuestras UTIs el pasado año, más del 40% recuperaron su autonomía para la vida diaria, incluso algunos pudieron volver a su casa a vivir de manera autónoma.
¿Cómo es posible una especialización como la que requieren las UTIs, en un centro residencial?
Cuando vimos la necesidad de especializarnos en rehabilitación, tuvimos la oportunidad de comprar una clínica puntera, la Clínica San Vicente, cuyos profesionales nos aportan asesoramiento y formación altamente especializada, con la que generamos talento que se vincula a nuestros centros para gestionar las UTIs.
Hoy la Clínica San Vicente es un hospital en una nueva ubicación, también en Madrid, dotado con los mayores avances tecnológicos para la rehabilitación, especialmente en materia neurológica del ictus y daño cerebral adquirido.
¿Ofrecen servicios médicos a sus residentes?
Nosotros defendemos que nuestros residentes, como cualquier ciudadano, tienen derecho a una asistencia sanitaria pública. Por nuestra parte tratamos de colaborar con los servicios públicos de salud para que puedan atender mejor a nuestros residentes. Por eso hablamos de prolongación de cuidados. En este sentido quiero destacar dos iniciativas: un servicio médico 24 horas, basado en un sistema avanzado de telemedicina, y la hospitalización domiciliaria en la residencia.
Cuéntenos de qué se trata.
Contamos con equipos de médicos y de especialistas atendiendo 24 horas las llamadas de los centros, especialmente en momentos en los que no hay presencia de médico, noches, fines de semana… Para ello hemos instalado centros receptores donde estos médicos con presencia 24 horas tienen acceso al historial de nuestros residentes y con una terminal en cada centro, el personal de enfermería o los gerocultores pueden conectarse y realizar diversas pruebas exploratorias que el medico va pidiendo y que se visualizan en tiempo real. Además, y esto es muy importante, el médico estará viendo al paciente y al personal del centro, y éstos, a su vez, verán al médico, lo que aporta mucha tranquilidad.
¿Y la hospitalización domiciliaria en la residencia?
Se trata de acuerdos con hospitales para que en determinadas situaciones que ellos valoran, en lugar de permanecer la persona en el hospital, con todo lo que supone de inconvenientes para él y también para su familia y de colapso del sistema, pueda ser atendido en la residencia, su casa, por el equipo del hospital. Hemos logrado ya acuerdos con los hospitales de referencia de todos nuestros centros en Cataluña y estamos intentando acuerdos similares en el resto de Comunidades.
Todo ello supondrá un importante ahorro en visitas a centros sanitarios…
Por supuesto. Hemos constatado que los desplazamientos a centros de salud por urgencias o para pruebas diagnósticas se han reducido en torno a un 40%. Y las estancias hospitalarias en un 45%
¿Hay alguna otra característica del modelo Vitalia, Casas para vivir con jardín, que quiera destacar?
Nuestra apuesta por la dignidad de las personas. En este sentido, nos comprometimos ya hace 7 años con un programa de eliminación de sujeciones, que entonces parecía utópico. Tener atada a una persona mayor, además de doloroso e incómodo, atenta contra su dignidad. Y me refiero tanto a sujeciones físicas como sobremedicación. En estos años hemos conseguido pasar de un 28% de residentes con sujeción a un 2,7% en el último mes. Y sin que se incrementen las caídas o sus consecuencias. Porque se puede garantizar la seguridad de las personas, sin sujeciones: espacios y mobiliario adaptado, tecnologías y, sobre todo, nuevas formas de trabajo en las que prevalezca la atención a la persona.
Ahora estamos comprometidos con evitar la postración de la persona en sillas de ruedas o en cama. Trabajamos en la rehabilitación y queremos que sean lo más autónomos posible, porque nada peor para una persona mayor que la postración.
¿Qué estrategias utilizan para lograr la vinculación de su personal y su compromiso con el modelo Vitalia?
Muchos profesionales ven en Vitalia una oportunidad de desarrollar su carrera profesional, porque apuesta por la innovación y favorece la creatividad. Además, nuestro carácter familiar facilita la promoción y la comunicación, y se sustenta, en buena medida, en las oportunidades de promoción interna: nuestras estructuras directivas a todos los niveles están ocupadas, casi en su totalidad, por personas que han empezado a trabajar con nosotros en puestos base y han adquirido no sólo experiencia profesional sino también cultura Vitalia.
¿Cómo enfocan su concepto de residencia, arquitectónicamente hablando?
Nuestros centros se diseñan con los criterios más exigentes para obtener las calificaciones Breeam y Passivhaus. Utilizamos para ello los mejores materiales y las más avanzadas técnicas constructivas. Es destacable que realizamos nuestros propios diseños y gestionamos todas nuestras obras directamente, lo que nos da experiencia para incorporar innovaciones y mejorar en cada una de ellas.
El 45% de la energía que consumimos procede de fuentes renovables y autoproducción. Para ello contamos con 52 plantas fotovoltaicas, que generan el 30% de la energía eléctrica que consumimos, y 45 plantas de biomasa, con las que producimos el 59% de la energía calórica en nuestros centros.
¿De qué modo es importante para su modelo residencial el entorno en el que se sitúan sus centros?
Creemos que las residencias tienen que ser servicios de proximidad, para que puedan seguir disfrutando de la vecindad y de la proximidad tanto a sus familiares y allegados como a su entorno. Por eso construimos nuestros centros donde viven las personas que lo necesitan y donde hay vida vecinal. Ello nos permite abrirlos a la comunidad, para que puedan beneficiarse de nuestros servicios de manera ambulatoria, sobre todo para procesos de rehabilitación. Y en un futuro contemplamos la posibilidad de que esa proximidad nos sirva también para llevar servicios residenciales a las casas, para favorecer la permanencia de las personas en ellas.
¿Qué nuevos proyectos tienen pensados para el corto-medio plazo?
Lo más innovador de nuestro plan de expansión es la ampliación de nuestro modelo “Casa” con apartamentos adjuntos a alguno de los centros residenciales. Tenemos ya 5 proyectos con un total de 400 apartamentos, con una inversión de unos 50 millones de euros. El primero de ellos estará en la Avda Ranillas, de Zaragoza, junto a Vitalia Expo.
La otra innovación es la construcción de nuevos Hospitales San Vicente, especializados en la rehabilitación del daño cerebral, el primero de los cuales hemos inaugurado este mismo año en Carabanchel, y tenemos otros tres proyectos en Leioa (Vizcaya), Getafe y Córdoba. Un total de 354 camas, con una inversión de 70 millones de euros.
¿Dónde nació usted y qué recuerdos guarda de su infancia y juventud?
Nací en La Fueva, un precioso valle en el Sobrarbe. Todos mis recuerdos son los propios de la vida en la aldea, el campo, la huerta, los animales, el monte…
Estudié en el instituto de Ainsa y posteriormente en Zaragoza. Hice Dirección de Empresas en la Escuela Nacional de Cooperativas y un Máster en IESE en la Universidad de Navarra.
¿Qué valores han marcado su trayectoria?
Sin duda alguna, el emprendimiento. Unido a la honradez y a la lealtad con quienes comparto o me acompañan en mis proyectos.
¿Cuáles son las premisas fundamentales en su vida?
Trabajar de manera incasable. No arrugarse ante las dificultades. Sólo así he podido crear una empresa con más de 4.500 trabajadores/as y haber gestionado inversiones por más de 800 millones de euros. Para una persona “de la aldea”, como yo, es emocionante.
¿Qué le gusta hacer en su tiempo libre?
Me apasiona la moto de trial. Corro la Copa de España, donde sigo obteniendo resultados que me sitúan en el pódium en muchas de sus pruebas. Y participo también en pruebas internacionales. Soy aficionado también a la bici de montaña, el sky, la vela…
¿Cuáles son sus rincones preferidos de Aragón?
Mi valle, La Fueva, el Sobrarbe… Tengo casa en uno de los rincones de La Fueva, en Luján, y me encanta disfrutar en ella del paisaje, el aire y, sobre todo, con mis paisanos.
¿Háblenos de su familia?
Tengo dos hijas y un hijo, Álvaro, que trabaja en la Organización. Comenzó como gerocultor, que es la mejor escuela de aprendizaje, y ha pasado por diversos niveles de la empresa hasta ser actualmente director regional. Se está formando en materia de dirección de empresas, para que en un futuro pueda substituirme en la dirección de Vitalia, asegurando así el carácter familiar y las esencias de nuestro Grupo.
¿Hay algo que quisiera añadir?
Sólo me aqueda invitar a que quienes quieran conocer el nuevo modelo residencial venga a visitar alguno de nuestros centros. Están abiertos a quienes nos quieran conocer. Y nos encanta enseñarlos…
Redacción AEA (LLM)