“Derecho al olvido” frente a buscadores

 No se trata de cambiar la historia, sino de permitir preservar la intimidad de las personas. El “Derecho al olvido” es un concepto legal que otorga a los individuos el derecho de solicitar la eliminación de información personal o sensible que se encuentra en internet, con el objeto de proteger su privacidad y permitir que ciertos eventos del pasado no afecten de manera permanente su reputación o simplemente su derecho a la privacidad.  Este derecho se basa en el principio de que, con el tiempo, cierta información puede volverse obsoleta o irrelevante y su presencia continua en línea podría causar perjuicios innecesarios a la persona afectada. Es relevante destacar que no existe un plazo para su ejercicio.

El “Derecho al olvido” no debe confundirse con el “Derecho de supresión” que, aunque complementarios, su diferencia radica en que en el segundo implica la eliminación de los datos personales de que se trate, del registro o lugar en el que consten y en el primero, al que dedico este artículo, consiste en anular el enlace que relaciona un nombre con un registro o noticia.

De origen jurisprudencial, pero plasmado en el RGPD y en la Ley Orgánica 3/2018 de Protección de Datos Personales y Garantía de los Derechos Digitales (LOPDGDD), el “Derecho al olvido” se ejerce ante los buscadores que son considerados responsables del tratamiento de datos personales porque son los que permiten la visualización y ubicación de la información que aparece en internet.  Estos, en su mayoría, cuentan con formularios para recibir dichas peticiones y aunque esta es la opción más recomendada también se puede ejercer ante los editores de páginas web.

En la era digital, nuestra presencia en línea es tan vital como la huella que dejamos en el mundo físico. Sin embargo, esta omnipresencia digital puede plantear desafíos importantes, especialmente cuando se trata de nuestra privacidad y reputación. En este contexto, el «Derecho al olvido» se erige como un valioso aliado en la protección de nuestra identidad digital.

En un mundo donde los motores de búsqueda son susceptibles de revelar información de nuestras vidas con un simple clic, surge la pregunta: ¿cómo preservamos nuestra identidad digital?  Y aquí es donde entra en juego el “Derecho al olvido”, un concepto legal que nos permite controlar la información que está disponible sobre nosotros en la red.

Recuerda que el “Derecho al olvido” no solo es la posibilidad de borrar información, sino que, a veces, también el derecho a una nueva vida y a una segunda oportunidad a la vez que protegemos nuestra intimidad.  En este camino hacia nuestra reconstrucción digital, es valioso contar con el asesoramiento de profesionales especializados en Derecho Digital que resuelvan nuestras dudas y nos guíen en el proceso.

Al ampararnos en el “Derecho al olvido”, no solo estamos reclamando nuestra privacidad, sino también construyendo cimientos sólidos para un futuro digital donde la identidad personal esté resguardada y en manos de aquellos a quienes pertenece: nosotros.  No lo olvides.