Diseñar para el usuario

Contar con un profesional del diseño a la hora de plantear un nuevo producto es importante ya que los diseñadores plantean su intervención desde diferentes puntos de vista, donde además de lo material, las sensaciones también son importantes. Los productos nos tienen que transmitir emociones, pero éstas no solo vienen desde la estética, también hay otros aspectos, esos que no podemos tocar ni ver y que no percibimos en primera instancia. Mostramos un ejemplo en el que se puede decir que la comodidad también se diseña. Se trata del sillón SENTRA, fabricado por Industrias Pardo y destinado al sector hospitalario y geriátrico. 

En este nuevo diseño, uno de los puntos importantes está basado en la comodidad y la propia ergonomía del producto. Se ha aplicado el concepto de “Zero Gravity” donde la adopción de unos grados concretos en la reclinación del respaldo y posición del reposapiernas permite que el peso del torso y piernas este equilibrado, repartiendo la  presión del cuerpo sobre la superficie tapizada del sillón. En este aspecto también influye la calidad del espumado y el tejido usado. El respaldo tiene un diseño con curvatura lumbar, aportando un extra de comodidad.

El modo en el que se realiza la reclinación del respaldo también ha sido objeto de estudio, de modo que al realizarse esta acción, el respaldo se separa del asiento, liberando de presión la zona lumbar.

Todo esto se sustenta sobre una estructura metálica, que ofrece una imagen diferenciadora; destacando las piezas laterales en plástico donde se integran las palancas de accionamiento de los movimientos y los apoyabrazos. Todo este conjunto ayuda a identificar y diferenciar el sillón de modelos competidores, dotando a este nuevo producto de una identidad propia, respaldando el posicionamiento de los productos de Industrias Pardo.

Los principales usuarios de este sillón son los pacientes y los acompañantes, de modo que se ha tenido en cuenta que pueden ser muy variados, por ello, los elementos para el manejo se han dispuesto en un lugar donde son accesibles tanto si se está en posición sentado como reclinado, además de ser fácilmente reconocibles al tacto. Los apoyabrazos son regulables en altura, lo que permite al sillón adaptarse a diferentes perfiles de usuario.

Otro de los puntos importantes ha sido el aspecto de los elementos tapizados, ya que son vitales para aportar un buen aspecto visual al producto. Se ha aplicado un sistema nuevo de costuras, haciendo que los acolchados sean más lisos y evitando que éstas puedan resultar molestas al tacto, además de facilitar la limpieza. El sillón está disponible en diferentes acabados en cuanto a tejidos y colores.

Se trata de que la estancia en un hospital sea lo más confortable posible, por lo que a la hora de abordar el diseño de este tipo de productos hay que poner el foco en varios puntos, desde todo lo que rodea al aspecto o estética general, pasando por la usabilidad, aspectos funcionales, etc.;  además de tener en cuenta las necesidades de los usuarios, donde como en este caso sentirse cómodo con el producto es importante.