Plan Director, un método preventivo orientado a los escolares

Bien es sabido, y si no, para eso estas líneas, que la Policía Nacional es un fiel reflejo de la sociedad, una corporación que crece en la misma dirección que la ciudadanía y que se adapta a los cambios y al progreso.

Crecer y hacerlo en la dirección correcta es sinónimo de bienestar y seguridad, por eso la Policía Nacional guía y acompaña en su crecimiento a los escolares, colectivo en el que se vuelca en aras de garantizar las herramientas necesarias para avanzar de la mano del civismo, la educación y el respeto.

Es necesario planificar ese acompañamiento de los más jóvenes, de ahí que surgiera allá por el año 2007 el Plan Director. Se trata de una estrategia elaborada por la Secretaria de Estado de Seguridad orientada hacia el colectivo escolar; alumnos, familias y personal docente reciben de especialistas de Policía Nacional las claves y las herramientas para conseguir un desarrollo fructífero en materias tales como los riesgos de internet, acoso escolar, adicciones, violencia de género, bandas juveniles, delitos de odio,… en definitiva, temáticas que preocupan a la sociedad y por ello, como no podía ser de otra manera, también a la Policía Nacional.

El Plan Director es, sin duda, una herramienta preventiva bidireccional, por un lado se trata de evitar que los jóvenes sean víctimas de los delitos, enseñando a reconocer cuando están siendo acosados, identificar riesgos y sus consecuencias y saberles dar una respuesta ante ellos. Por otro lado, hay que evitar que los jóvenes de hoy sean los victimarios de mañana, deben ser conocedores de que una vida al margen de lo legítimo tiene una serie de responsabilidades penales y que por lo tanto, los errores tienen consecuencias.

No hablo de crear un miedo ante posibles represalias en caso de no actuar de manera cívica, consiste en concienciar al alumnado de que es posible crecer en armonía, con el compañerismo, la educación y el respeto por bandera.

El Plan Director está dirigido a la comunidad educativa, evidentemente un pilar importante es el alumnado, pero no hay que olvidar que los jóvenes necesitan el apoyo de los padres y profesores para abrirse camino. Por ello, dentro de esta estrategia se forma a familiares y personal docente, una formación paralela a la del alumnado, en la que resulta imprescindible afianzar los conceptos que harán reconocer si los escolares tienen algún problema dentro del gran abanico de preocupaciones en las que se les forma.

Resulta necesario adaptar a los educadores de los jóvenes y ahí entran tanto docentes como familiares, a la problemática de hoy en día, la cual ha cambiado mucho desde que esos padres o profesores fueron los alumnos. Es imprescindible que los garantes de ese crecimiento sepan reconocer cuando tienen en sus aulas o en sus casas a un joven que está siendo acosado, que sufre algún tipo de adicción o que se junta con otros jóvenes que no son una buena influencia.

Los especialistas de Policía Nacional deben concienciar en sus charlas que internet, una de las grandes herramientas en cuando al avance en general, esconde un peligro que potencia cualquier tipo de problema que antes terminaba con el sonido de la sirena que mandaba a los alumnos a casa.

Aquel menor que sufría el acoso de sus compañeros de colegio tenía una tarde y en el mejor de los casos un fin de semana o unas vacaciones para olvidarse, en la medida de lo posible, de los insultos que había recibido en el colegio. Ahora con el alcance de internet ese joven no deja de sentirse humillado los siete días de la semana, las veinticuatro horas del día.  

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