Protección de datos y ciberataques en la hostelería: un sector en la mira
Susana Pastor Embi
Directora de Marketing y responsable
de ATREVS “INTÉRPRETES DIGITALES”
susana.pastor@atreuslegaldigital.es
Queridos lectores, es obvio para todos que en los últimos años la hostelería, uno de los sectores más importantes en Aragón, se ha transformado y que en gran parte esta revolución imparable es el resultado de la llegada de la digitalización con la que hemos ganado en eficiencia y comodidad, pero, y de esto vamos a hablar, también hemos abierto la puerta a un enemigo silencioso: los ciberataques. Y es que ofrecer experiencias inolvidables a los clientes no puede dejar de lado una cuestión crucial: la protección de datos.
Cada vez que un cliente reserva una mesa o realiza una compra online, deja tras de sí un rastro de información valiosa: nombre, teléfono, datos bancarios… Antes, todo esto quedaba en papel, pero ahora lo gestionamos digitalmente y aquí está el problema: esos sistemas no siempre están bien protegidos, convirtiendo a la hostelería en un objetivo muy atractivo para los ciberdelincuentes, sin importar el tamaño del establecimiento ya que todos pueden ser víctimas si no toman las medidas necesarias.
Si algo sabemos, es que la hostelería en Aragón, no solo es clave para nuestra economía, sino que es también parte esencial del turismo y del gran impulso gastronómico de la comunidad. Desde el bar del pueblo hasta los restaurantes más top en Zaragoza, Huesca o Teruel, todos dependen de una infraestructura tecnológica que, si no se protege, puede generar graves pérdidas, tanto económicas como en reputación.
Sirva como dato de referencia el informe reciente del Instituto Nacional de Ciberseguridad (INCIBE), que dice que los ataques a pymes en España, incluyendo los de hostelería, han aumentado un 30 %. Y no hablamos solo de proteger datos personales también de estar en juego la confianza de los clientes, ya que un fallo de seguridad puede dañar gravemente la imagen de cualquier negocio.
Y, ¿qué pasa cuando ocurre un ciberataque? Sin duda, llega el caos. No es solo la pérdida de datos, también la interrupción de los sistemas puede hacer que no se procesen reservas, que no se puedan cobrar las cuentas o, en algunos casos, que el negocio sea víctima de ransomware, un ataque en el que los ciberdelincuentes bloquean los sistemas a cambio de un rescate y que es cada vez más común, por no hablar de que para los responsables de los establecimientos hosteleros, las consecuencias van mucho más allá de lo técnico por la enorme presión y estrés que generan, creando una sensación de impotencia y urgencia.
Es importante resaltar que muchos de estos ataques se producen por errores humanos: contraseñas débiles, sistemas sin actualizar o abrir un correo malicioso. Por eso, invertir en la formación del personal en cuestiones de seguridad digital es esencial y tan importante como tener un buen antivirus y es que como decía Bruce Schneier, experto en ciberseguridad: «La seguridad es un proceso, no un producto». Proteger los datos y evitar ciberataques requiere una estrategia completa. No basta con instalar un programa de seguridad y olvidarse. Hay que realizar auditorías periódicas, encriptar los datos y, por supuesto, usar doble autenticación, entre otras medidas imprescindibles para que cualquier negocio de hostelería este protegido.
Para concluir, no quiero transmitir un mensaje alarmista, al contrario. Los clientes podemos estar tranquilos y seguros, ya que la hostelería sigue siendo un sector que pone su máxima dedicación en garantizar experiencias de calidad. Sin embargo, es importante recordar que la seguridad digital no es algo que debamos tomar a la ligera. No podemos bajar la guardia. Contar con el apoyo de profesionales en protección de datos y ciberseguridad es esencial para proteger no solo los negocios, sino también la confianza de los clientes. Estar bien asesorado es la mejor estrategia para evitar riesgos y mantener el servicio al más alto nivel.