Marta Ortín (CTO DIVE Medical):»Los problemas visuales no detectados en pacientes de corta edad pueden generar secuelas muy severas en su sistema visual y en su desarrollo general, su educación y su socialización»
Marta Ortín
CTO DIVE Medical
Con motivo de la celebración del Día de la Mujer y la Niña en la Ciencia entrevistamos a Marta Ortín, CTO de DIVE Medical, un dispositivo que permite explorar la visión en cualquier paciente incluso en los que no pueden comunicarse con los médicos, como por ejemplo bebés, niños pequeños o personas con problemas neurocognitivos y en los que les resulta más complicado examinar la visión.
¿Podría contarnos su trayectoria académica y profesional?
Estudié Ingeniería Informática, y después hice un Máster y un Doctorado en Ingeniería de Sistemas e Informática, y un postdoctorado en el grupo de investigación Graphics & Imaging Lab, todo ello en la Universidad de Zaragoza. A lo largo de mi carrera investigadora, he realizado estancias en la Universidad de Ferrara (Italia), Intel Mobile Communications (Alemania) y el Korean Advanced Institute of Science and Technology (Corea del Sur).
Fue durante el postdoctorado cuando empecé a trabajar en el desarrollo de DIVE, que comenzó como un proyecto de investigación más.
Háblenos de DIVE.
DIVE es un dispositivo que nos permite explorar la visión en cualquier paciente, incluso en aquellos con los que los médicos no se pueden comunicar (bebés, niños pequeños o personas con problemas neurocognitivos) y en los que les resulta más complicado examinar la visión (como los pacientes con baja visión).
Para los profesionales, es un gran reto explorar a estos pacientes, y los resultados que pueden obtener son muchas veces subjetivos y poco precisos. DIVE es capaz de hacer un examen visual completo a estos pacientes y ofrecer medidas objetivas y precisas sobre su función visual. Así, ayudamos a realizar un diagnóstico más temprano y fiable, y facilitamos el seguimiento de patologías y de terapias visuales.
¿Cómo nace DIVE y cómo ha ido evolucionando la empresa en este tiempo?
DIVE comenzó con un proyecto de investigación en colaboración entre oftalmólogos y ópticos del Instituto de Investigación Sanitaria de Aragón e ingenieros de la Universidad de Zaragoza. Cuando presentábamos nuestros resultados en congresos, despertaban mucho interés entre los profesionales del campo. Nos decían frecuentemente que les gustaría poder utilizar la herramienta en sus consultas y que pensaban que era algo útil que podría beneficiar a muchas personas.
Animados por la buena acogida, comenzamos esta aventura emprendedora, y constituimos la empresa DIVE Medical a principios de 2020. A partir de ahí, varias de las personas que habíamos trabajado en la investigación del dispositivo dentro de las instituciones, nos incorporamos a la empresa, donde somos ya seis trabajadores.
¿Quién puede solicitar sus servicios?
DIVE es útil para profesionales que tienen que explorar la visión en pacientes no colaboradores o pacientes con baja visión. Esto incluye optometristas y oftalmólogos.
Además de realizar exámenes completos de la función visual, DIVE también realiza un cribado temprano de la función visual utilizando inteligencia artificial, de manera que detecta qué niños no tienen un desarrollo visual normal y deben ser derivadas al especialista. En este contexto, DIVE también es útil para pediatras y otros entornos en los que se realicen programas de cribado visual, incluyendo países en vías de desarrollo.
¿De qué manera logran explorar la función visual en pacientes no colaboradores?
DIVE tiene una pantalla en la que mostramos estímulos diseñados para evaluar diferentes aspectos de la función visual. Además, incorporamos tecnología de eye tracking o seguimiento de mirada, que nos permite conocer el punto de esa pantalla al que el paciente está mirando en cada momento.
El paciente solamente tiene que sentarse delante del dispositivo y mirar a los estímulos, como si mirara la televisión. Mientras tanto, nosotros registramos los puntos de la pantalla a los que mira el paciente y, a partir de esa información, calculamos las métricas que describen el comportamiento visual del paciente.
¿Cómo de relevante resulta obtener un diagnóstico temprano en pacientes de corta edad?
Los primeros años de vida son clave para el desarrollo del ser humano. La mayor parte de la información que recibe un bebé o niño pequeño proviene de la función visual, y es el punto de partida para el desarrollo de las habilidades perceptuales, cognitivas, motoras y sociales. Por lo tanto, la presencia de problemas visuales no detectados y no tratados en estos pacientes de corta edad puede generar secuelas muy severas no solo en su sistema visual, sino también en su desarrollo general, su educación y su socialización.
Ustedes colaboran con Huawei. ¿En qué consiste su acuerdo?
Huawei empezó a desarrollar teléfonos móviles con un chip que permitía ejecutar modelos de inteligencia artificial, y estaban interesados en acercar esta tecnología a la gente y ayudarles a entender sus beneficios. Lanzaron el programa TECH4ALL, en el que se enmarca nuestra colaboración, a través del cual potencian diferentes proyectos de corte social.
Concretamente, la colaboración que tenemos con ellos se ha centrado en el desarrollo y validación de nuestra herramienta de cribado visual basado en inteligencia artificial. Gracias al apoyo de Huawei, hemos realizado exploraciones en más de 4.000 niños en varios centros de España, Méjico, Rusia, Vietnam y China (Mainland y Hong Kong).
Han ganado varios premios en estos años, ¿cuáles les han marcado especialmente? ¿Les ha servido para darse a conocer?
Siempre es una alegría cuando recibimos algún premio. Me resultaría muy difícil mencionar uno concreto porque no sería justo para el resto. Estamos muy orgullosos de que la gente y las instituciones que otorgan premios valoren tan positivamente nuestro proyecto y nos elijan para darnos su apoyo. Definitivamente, los premios que hemos recibido nos han ayudado a darnos a conocer y nos animan a todo el equipo a continuar con nuestra labor.
Este mes se celebra el Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia. ¿Cómo decidió usted dedicarse a la ciencia?
Desde pequeña, siempre me ha gustado más la rama de ciencia y tecnología. Las ciencias me parecían mucho más entretenidas, y veía las Matemáticas como un juego en el que resolver enigmas y problemas.
En el colegio en el que yo estudié, teníamos una asignatura de informática en la que nos enseñaban a programar algunas cosas sencillas, incluso desde Primaria. Esa fue siempre mi asignatura favorita, y creo que es la razón por la terminé estudiando Ingeniería Informática. Estoy convencida de que me ayudó a comprender qué cosas se podían hacer con la tecnología y despertó mi interés por la ingeniería.
¿Podría contarnos quiénes son sus referentes?
Siempre me he fijado más en las personas de mi entorno y del día a día que en grandes nombres famosos de la historia. He tenido la suerte de crecer en un ambiente en el que todo el mundo me ha animado a estudiar y dedicarme a lo que más me gustara, esforzándome al máximo de mi capacidad y sin plantearme nada más allá. Mi madre es Química y estoy convencida de que verla trabajar desde que era pequeña ha hecho que yo nunca llegara a plantearme si había algunos trabajos a los que yo no pudiera dedicarme.
¿Cómo animaría a una niña o a una joven a dedicarse a la ciencia?
Yo animaría a cualquier niña o niño a dedicarse a aquello que más le apetezca y que más le guste. Primero tienen que informarse de todas las opciones que tienen para su futuro, y de las cosas que se pueden llegar a hacer después de estudiar cada carrera. A partir de toda esa información, les diría que escojan lo que más les guste sin tener en cuenta nada más, que no piensen si en ese trabajo va a haber más chicas o más chicos, o si existe un prototipo de personas tradicionalmente asociado a esos estudios.
En las ciencias hay proyectos muy chulos y, si se esfuerzan en aquello que les gusta, la gente va a valorar un trabajo bien hecho por encima de cualquier otra característica.
¿Qué es lo más gratificante para usted de su trabajo?
Muchas veces se piensa que el trabajo de un informático consiste en estar sentado solo frente al ordenador todo el tiempo, pero desde que empezamos a trabajar el desarrollo de DIVE con los médicos del Hospital Miguel Servet de Zaragoza, hemos podido ver el impacto de nuestro trabajo de manera muy cercana y muy inmediata. Ver de manera tangible el impacto beneficioso que lo que hacemos tiene en muchos pacientes es para mí lo más gratificante.
Redacción AEA /LLM
Entrevista incluida en el número 146 de la revista Actualidad de las Empresas Aragonesas, publicado en febrero de 2022. La revista completa se puede consultar aquí